Los migrantes, un nuevo flanco para Chile en la inobservancia de los Derechos Humanos
Mabel Cobos del « Movimiento Acción Migrante », pidió al gobierno detener su lenguaje agresivo, racista y discriminatorio hacia las personas migrantes.
En el marco del Mecanismo de Examen Periódico Universal del Consejo de los Derechos Humanos (EPU), la representante del « Movimiento Acción Migrante » lamentó que Chile también haya caído en la hostilidad hacia las personas migrantes.
Mabel Cobos, invitada por la ONG « France-Libertés y la Fundación Danielle Mitterrand, precisó que esta hostilidad, se traduce no sólo en políticas y discursos racistas, sino también en una ausencia de políticas públicas que tiendan a una mayor inclusión, desarrollo y bienestar.
El trato acordado a los emigrantes, junto la represión del pueblo mapuche, son los principales incumplimientos de Chile en materia de derechos humanos, según las diferentes recomendaciones formuladas por los participantes en la tercera comparecencia ante ante el Mecanismo del EPU del Consejo de los Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra
Visas y expulsiones masivas
« Este último año, hemos enfrentado la instauración de nuevas visas para haitianos y venezolanos; un proceso de regularización lento, con información confusa y que impide trabajar a las personas inscritas, hasta que no obtengan su nueva documentación, lo que puede tomar hasta un año ».
También criticó las expulsiones masivas de ciudadanos bolivianos y colombianos; « un plan de retorno dirigido a personas haitianas, todo lo cual ha constituido lo que nosotros llamamos políticas racistas y discriminatorias », enfatizó Mabel Cobos.
En cuanto a las cifras gubernamentales sobre el aumento de la población extranjera, alrededor de 6% de la población, Mabel Cobos lamentó que « estos números en vez de ser tomados seriamente, han sido utilizados de la peor forma, culpabilizando a la migración por los males nacionales, entre ellas, falta de oportunidades laborales, colapso de servicios públicos, criminalizando a las comunidades migrantes y discriminando por nacionalidad, origen, idioma y color de piel ».
Aporte económico y educación
Sin embargo, -agregó- datos de diversas instituciones nacionales e internacionales, apuntan a que las personas inmigrantes tienen una tasa de participación laboral del 80%, su nivel educacional es algo superior a la población local y aunque se señale lo contrario, la recaudación pública obtenida por la aportación de las personas nacidas en el extranjero es superior al gasto generado por esas personas.
Asimismo, los servicios públicos que muestran problemas no se deben al aumento de inmigrantes sino al colapso de un sistema que lucra con los derechos y los transforma en bienes de consumo. Ya sea salud, educación o vivienda. Es decir, como en muchas partes, los y las migrantes, somos chivos expiatorios de los problemas locales que los gobernantes no quieren solucionar.
Situación de las mujeres y niños migrantes
Mabel Cobos calificó de preocupante el vacío en la implementación de políticas dirigidas a mujeres migrantes, en particular la situación de aquellas con visa dependiente de sus maridos, pues dicha modalidad impide trabajar de forma remunerada y con contrato, vulnerando su derecho al trabajo e incumpliendo las normativas internacionales.
Por otra parte, también vemos con preocupación que haya un total aproximado de 1800 niños y niñas migrantes que se encuentran retenidos en el Servicio Nacional de Menores (SENAME).
« Pese a que niños, niñas y adolescentes migrantes en situación irregular pueden acceder a educación parvularia, básica y secundaria, al cumplir la mayoría de edad, no pueden tener acceso a la educación superior y a las ayudas del Estado ya que todas las becas y beneficios estatales tienen como requisito tener la nacionalidad chilena », subrayó.
Apátridas y nueva ley
« También preocupan los casos de apatridia puesto que aún existen niños y niñas registrados como hijos de extranjeros transeúntes sin reconocerse el principio ius solis otorgando la nacionalidad a todo niño y niña que nazca en Chile, independiente del estatus migratorio de sus progenitores ».
En cuanto al nuevo proyecto de ley de migraciones aprobada por la Cámara de Diputados señaló que « para nosotros significará un retroceso en derechos y calidad de vida », ley definida como la forma de poner orden y combatir la ilegalidad, la delincuencia, el narcotráfico y el crimen, como si eso fuera lo que la población migrante efectivamente implantara en Chile.
« No se expresó por la inclusión, no se expresó por los derechos, no se expresó por la interculturalidad, porque se nos sigue constituyendo como un problema, como una invasión, sin ninguna evidencia más, que la manipulación mediática que se despliega ».
Swisslatin / Alberto Dufey (22.01.2019