La maternidad adolescente es un grave problema mundial
En los países en desarrollo cada año más de 7 millones de menores de 18 años dan a luz.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) alerta sobre el problema de la maternidad adolescente, especialmente en los países en desarrollo, donde cada año más de 7 millones de menores de 18 años dan a luz.
Nueve de cada diez de esos partos ocurren dentro de un matrimonio o unión de hecho, destaca el informe el Estado de la Población Mundial 2013, que indica además, que existen dos millones de partos anuales de niñas menores de 15 años.
Impacto en la educación de las niñas
Si esas tendencias continúan, la cantidad de partos en ese segmento de la población podría elevarse a tres millones por año en 2030.
Por otra parte, el documento del UNFPA hace hincapié en que la maternidad precoz tiene graves consecuencias en la permanencia de las niñas en el sistema educativo, así como en su salud, y en las oportunidades laborales a largo plazo.
Señala que en todas las regiones del mundo, las niñas pobres, las que tienen poca formación escolar, y las de zonas rurales y minorías étnicas son más proclives a quedar embarazadas.
Un problema de Derechos Humanos
El embarazo en adolescentes está entrelazado con problemas de derechos humanos. A una niña embarazada presionada o forzada a dejar la escuela, por ejemplo, se le niega su derecho a la educación.
A una niña a la que se le prohíbe acceder a métodos anticonceptivos o incluso a información sobre la prevención de embarazos se le niega su derecho a la salud.
Desde una perspectiva de derechos humanos, una niña que queda embarazada, independientemente de las circunstancias o razones, es una niña cuyos derechos quedan menoscabados.
Inversiones en capital humano
Hay 580 millones de niñas adolescentes en el mundo. Cuatro de cada cinco viven en países en desarrollo. Si se invierte en ellas hoy, se desatará todo su potencial para forjar el futuro de la humanidad, subraya el informe.
Las inversiones en capital humano son esenciales para proteger estos derechos. No solo ayudan a las niñas a desarrollar todo su potencial, sino que también forman parte de la responsabilidad del gobierno de proteger los derechos de las niñas y cumplir los tratados e instrumentos sobre derechos humanos.
En particular, la Convención sobre los Derechos del Niño, y los acuerdos internacionales, como el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo de 1994, que sigue siendo la guía del trabajo del UNFPA en la actualidad.
Swisslatin (31.10.2013)