La FAO deplora el desperdicio de la producción agrícola, especialmente de alimentos
El pan es un ejemplo, representa un 25% de desperdicio de los productos de cereales en Europa.
La Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO) llama a tomar medidas urgentes para poner término al desperdicio de productos agrícolas, especialmente en Europa y Asia Central.
A medida que la población crece y las necesidades de alimentos continúan aumentando, el mundo no puede permitirse el lujo de seguir malgastando un tercio del total de la producción agrícola. Son necesarias acciones coordinadas y enérgicas, y en muchos casos, el sector privado tendrá que tomar la iniciativa.
Diferencias por niveles de ingresos
Un estudio de la FAO examina las pérdidas y el desperdicio de alimentos en la región, comparando los países de ingresos bajos, medianos y altos, y fijándose en siete cadenas de suministro diferentes : lácteos, pescado, carne, frutas y hortalizas, cultivos oleaginosos y legumbres, raíces y tubérculos, y cereales.
El documento revela diferencias notables en los patrones de las pérdidas y el desperdicio de alimentos en función de los niveles de ingresos. La mayor parte de las pérdidas en los países desarrollados se producen en la fase de consumo, mientras que en los países de medianos y bajos ingresos éstas se producen en las etapas de producción y post-cosecha dentro de la cadena de valor.
El desperdicio del pan
El pan se toma como ejemplo. El exceso de oferta, la capacidad de compra y la preferencia de los consumidores por el pan fresco, -así como mayores tasas de descarte de otros cereales- resultan en casi un 25 por ciento de desperdicio de los productos cerealeros en los países de altos ingresos.
En los países de ingresos medios, los niveles de desperdicio están en el 8,5 por ciento, y en los países de bajos ingresos de tan sólo un 5 por ciento. Otro de los motivos del desperdicio de alimentos son las normas estéticas, y la preferencia de los consumidores por productos con un tiempo de conservación más largo.
Problema en las explotaciones agrícolas
El comportamiento del consumidor es sin embargo tan sólo una parte del problema. Una parte importante de las pérdidas de alimentos pueden producirse a nivel de las explotaciones agrícolas, o durante el almacenamiento, el transporte y la elaboración.
Atendiendo al grupo de raíces y tubérculos (papas y raíces hortícolas), el estudio de la FAO revela que las mayores pérdidas se dan en la fase de producción, con más de un 30 por ciento de cultivos perdidos o desperdiciados durante el proceso de recolección. Una pérdida adicional del 17 por ciento se produce en el procesamiento y envasado.
En los países de medianos y bajos ingresos, sin embargo, el estudio apenas encontró pérdidas o desperdicio en la elaboración y envasado de las raíces y tubérculos.
Swisslatin (04.04.2014)