Cada año van a dar al mar unos 20 millones de toneladas de plásticos
Informe del PNUMA advierte que los plásticos marcados como biodegradables son también parte del problema.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) reveló en un nuevo informe que cada año van a dar al mar unos 20 millones de toneladas de plásticos y aseveró que los marcados como biodegradables son parte de ese problema.
La creciente cantidad de productos etiquetados como “biodegradables” no quiere decir que esté disminuyendo la cantidad de plásticos que terminan en el océano ni que se atenúen los riesgos físicos y químicos que suponen esos materiales para los ecosistemas marinos.
Más desechos biodegradables
Según el estudio, la biodegradación de los plásticos ocurre en una serie de condiciones que se presentan en muy raras ocasiones, además de que hay evidencias de que la gente desecha más los productos etiquetados como biodegradables.
El director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner, subrayó que una vez que los plásticos llegan al mar se quedan ahí y se rompen en partículas pequeñas.
“El informe muestra que no hay soluciones rápidas y que hace falta una gestión más responsable del ciclo de vida de los plásticos para reducir su impacto en los océanos y ecosistemas”, apuntó.
El documento también encontró que de los 280 millones de toneladas de plásticos que se producen anualmente a nivel mundial, un porcentaje muy bajo se recicla y el resto termina en el mar.
El nuevo informe destinado a verificar la tesis de que los plásticos consideran ‘biodegradable’ puede jugar un papel importante en la reducción de estos impactos ambientales negativos.
Los plásticos más utilizados
El informe revela que los plásticos más utilizados para aplicaciones generales, tales como polietileno (PE), polipropileno (PP) y el cloruro de polivinilo (PVC) no son biodegradables en ambientes marinos. Los polímeros, que se biodegradan en condiciones favorables en la tierra, son mucho más lentos para romper en el océano y su adopción generalizada es probable que contribuya a la contaminación marina y las consecuencias indeseables consiguientes para los ecosistemas marinos.
Los microplásticos
El estudio también analiza el impacto ambiental de los plásticos oxo-degradables, enriquecidas con un pro oxidante, como el manganeso, que precipita su fragmentación. Se encontró que en los ambientes marinos de la fragmentación es bastante lento y puede tardar hasta 5 años, durante los cuales los objetos de plástico siguen tirándose al mar.
Los plásticos oxo-degradables representan también una amenaza para los ecosistemas marinos, incluso después de la fragmentación. Los microplásticos creados en el proceso de fragmentación permanecen en el océano, donde pueden ser ingeridos por organismos marinos y facilitan el transporte de microbios dañinos, patógenos y especies de algas.
Swisslatin / UNEP News (19.11.2015)